La propuesta de hoy es trabajar en la estrategia de mercado. Vamos a hablar sobre generar nuevas oportunidades y sobre encontrar nichos en los que la competitividad sea menor. Las vías son ampliar horizontes y generar valor con innovación. En definitiva: La Estrategia del Océano Azul.

La estrategia del océano azul es una estrategia que trata de impulsar la competitividad y la diferenciación empresarial

La teoría

La estrategia del océano azul fue creada por W. Chan Kim y Renée Mauborgne, profesores de la INSEAD Business School. Esta teoría fue acuñada en el año 2005, tras la publicación de un libro que se titula de la misma forma que la teoría, Blue Ocean Strategy (Estrategia del Océano Azul), publicado en 2005.

Océanos rojos vs. Océanos azules

La estructura de su teoría puede parecer simple: se basa en que los límites del mercado y la organización industrial, denominados como océanos rojos, pueden transformarse. En este sentido, han teorizado sobre una fórmula que pueden aplicar las empresas cuyos productos o servicios son similares a otros y que ofrecen al mismo mercado. Su incógnita: ¿Cómo podría tu empresa hacer frente a este problema?

Para llegar a los denominados océanos azules, la mejor herramienta es la innovación.

La diferenciación es fundamental. Sin embargo, la teoría considera que, en los últimos años, la estrategia de las compañías se ha centrado en competir en mercados saturados por la competencia (océano rojo), en lugar de encontrar nuevos nichos de mercado en los que diferenciarte (océano azul).

El océano rojo que representa las condiciones de un mercado en el que las empresas luchan constantemente entre ellas, con el objetivo de conquistar una posición.Se trata de mercados saturados con muchas empresas ofreciendo servicios o productos similares.

El océano azul, reivindica la búsqueda de un mercado libre de competidores, donde la lucha constante por un espacio en el mercado no sea necesaria. Según la teoría del océano azul, las empresas no triunfan mediante la competición directa con otras empresas.

La clave se encuentra en la búsqueda y creación de océanos azules; mercados hasta ahora vacíos, fácilmente conquistables y de rápido crecimiento.